Los varones
no cruzan de acera a acera para saludar a un profesor, sí las mujeres. Buen
día.
Si veo que
alguien es capaz en Historia le exijo, tiene que esmerarse y todo el año. Su
vocación debe ser ejercitada. A ti, como todo el año ni te preocupaste te doy
tres días y pasas a dar lección, tema de todo el año. Si das bien, pasas y no
vas a Marzo, si no pasas ya sabes que durante el verano estudiarás. Hasta luego.
Y esto en la
calle frente casi a la
Escuela Nacional de Comercio de San Isidro, donde pasé mi
secundaria.
No fui a Marzo,
fue una experiencia maravillosa pasar por los temas del año, se puede hablar de
aquello que llamó la atención, se tiene libre elección y esto conduce a la
experiencia del desenvolvimiento personal, por ende a lo temático interesante por vivencia propia.
No sé si ella
sabia si yo estudiaba… algo al menos, simplemente Historia no era mi fuerte. Y
esto lo tenía esa educadora muy claro. Me daba sin embargo la oportunidad.
Y una vez
escuché de los alumnos que nadie la quería por exigente, tampoco yo entonces,
y hoy, viéndolo con la experiencia de la vida, es al revés. La llevo en
mi alma con sumo agradecimiento, aunque no recuerde su nombre. Conservo sus
ojos, sus palabras, su figura allí en la acera, impregnada en mi alma, en mis
mejores recuerdos. Hoy comprendo la historia…desde la vida que he recorrido.
Los maestros
Waldorf tienen esa pasta, como la de esta profesora argentina, quien
luego me dio una pauta. Si quieres saber historia argentina tienes que leer
los tomos de Rozas, es un historiador brasilero, el mejor. Pues en historia
generalmente la escribe el vencedor y no el investigador. Posteriormente el
investigador tiene la vigencia y sabe de los sucesos de la realidad.
Recordé su nombre en una conversación con un señor quién también fue su alumno en la misma escuela de Comercio de San Isidrio y ambos no olvidaremos a la señora Ghibaudi descendiente de historiasores conocidos,.,tambien de escritores".
Por esto tú también apreciado lector para mi
desconocido, mira a los maestros y a ti mismo con otros ojos. Blandos no, duros
tampoco, pero severos y con cariño, correctos, fuertes y veraces. La misma vida te enseñará donde están los verdaderos valores.Recordé su nombre en una conversación con un señor quién también fue su alumno en la misma escuela de Comercio de San Isidrio y ambos no olvidaremos a la señora Ghibaudi descendiente de historiasores conocidos,.,tambien de escritores".
Tatiana Schneider 22.1.2013
Yo tambien tuve a la profesora ghibaudi en el comercial de san isidro. Me hizo amar la historia como una herramienta para pensar y no dejarme manipular por los intereses de otros. En definitiva nos enseñaba mas que historia, nos enseñaba a ser libres. Inolvidable. Gracias por su recuerdo
ResponderEliminarEfectivamente nos enseñpo a ser libres, apreciado Chingolo, a tener pensamientos propios para la realidad y a conservar ideales en buscar la verdad.
EliminarTatiana Schneider 24 de Febrero de 2022