Para muchísimos ortodoxos seguidores no siempre era esto de su comprensión, para muchos todo lo eléctrico era "Ahrimánico" y por ello se debiera evitar en lo posible. Es que se creía que el Goetheanum era un templo que debiera ser protegido de tanta técnica.
Steiner que no veía con gusto las unilateralidades trataba de enfrentarse a ello con el correspondiente sentido común.
Después de una función de Euritmia, donde la fuerte iluminación se utilizó en el escenario, fue una dama mayor hacia Steiner y opinó: "Yo considero imposible que las euritmistas sean tan fuertemente irradiadas por Ahriman" Steiner le respondió: "Alégrese usted, que con Lucifer, quien siempre juega en el arte un rol, se le ha dado un equilibrio".
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