A mí, no me mires
Franz Lehnert |
Flor Carmela Villafana, educadora de especiales fallecida ya, una de
las maestras de entonces, había ubicado a los niños
con dificultades múltiples en la primera
fila y a ellos apelaba Franz con sus palabras llenas de cariño, para que estando él
lejano en Suiza, desde esta escuela los
niños limeños del San Christoferus le escribiesen una carta.
Estudiantes de la Formación en
Educación Especial Antroposófica estaban en su tercer año en Lima y sus profesores,
junto a
los Padres y familiares de los
niños, se hallaban presentes...
No bien el señor Lehnert terminó
su frase diciendo...y... queridos niños,
espero que me escriban una carta...una
niña a voz de cuello acercando las manos a su propios ojos dijo a viva
voz: A
mí, no me mires.
La saludable risa de los presentes llenó el auditorio. La
niña hizo conciencia que ella no le escribiría, apenas sabía alguna letra...
Franz se acercó a la niña manifestándole que no se preocupase...Con Carmela , su maestra, con sus
compañeros y entre todos podrían
escribirle la carta. La sonrisa iluminó su carita cuando respondió
quedamente: Sí.
Yo no sé si Carmela y sus alumnos
enviaron la carta. Sólo sé que aún hoy, cuando alguien pide algo que creo no
podré lograr uso la misma frase: A mí, no
me mires y desde aquel entonces esa
respuesta espontánea a Franz
Lehnert se convirtió en una frase muy
usada entre de los estudiantes a la
hora de hacer algunas tareas: A mí, no
me mires.
*Hoy lleva el nombre Heilpädagogische Schule JUFA-RÄGEBOGE
Hoy la escuela Rägeboge està cerrada. El edificio no existe. Vive en el alma de todos los alumnos , vive en nosotros, los que alli trabajamos. Tal vez , los alli aprendido, los frutos del propio trabajo vivan dejandoselo a otros.
ResponderEliminarCierto. Rägeboge no es el edificio, otro es su nombre, Nada pareciese quedar del Arco Iris u Arco Baleno como se dice en Italia. Sí,los que allí trabajaron, estudiaron, aprendieron y estan dando de lo mejor a los demñas de las enseñanazas recibidas allí, en el Taller de biografía actual, en los cursos de pintura de ahora, en el acopañamiento terpéutico de los veranos en el Sonnenhof, lugar de donde partió Franz Lehnert con sus estudios bajo el brazo y su cálida mirada para la diversidad, la disharmonía y la discapacidad, hasta para el deterioro hogareño de niños extranjeros en Suiza, faltos de atención materna y paterna por su rechazo familiar.
EliminarLas semillas de grirasol esparcidas por el mundo fructificarán y Rägeboge será una parte del cielo espiritual donde serán reunidos los otrora necesitaos de cuidados y atenciones especailes, para preparar su nueva vida, ahora con el saber necesario de ayudar a otros en situaciones semejantesy dejándoles ese quehacer a otros que continúen la tarea educativa sanadora para la próxima encarnación. Es el quehacer de los ángeles dar lo nuevo y sano.