lunes, 11 de diciembre de 2017

Títeres, sueño de un valiente Kasperl, el ser tal vez un Polimanzist...

 Nancy Salvador Betancourt de Ecuador me ha escrito, me ha enviado además un afiche y me relata que con su hija han hecho una representación de marioneas. A teatro lleno y repitiron las funciones. ¡Una alegría! 
El afiche muestra una escena de un teatrillo de títeres como aquellos de antaño y no un teatrillo de mesa con marionetas..Las marionetas con sus hilos se manejan desde arriba, el teatrillo de mesa es adorado por los niños más pequeños
Yo se que los títeres atraen muchísimo a los niños escolares y aún a sus mayores...padres, tíos y abuelos



“Tante” Ingeborg Knäper+ hacía títeres y los mostraba todos los fines de semana, el sábado por las tardes para los niños del vecindario donde está, aún hoy, el Jardín de Infantes Waldorf, donde ella misma era "maestra jardinera" ya que era su casa y allí en el primer piso también ella vivía.
Visitar el teatrillo de títeres no tenía costo en aquel entonces, pues Ingeborg solía decir la alegría de los niños con nada se puede pagar...
Los padres o los abuelos agradecidos traían las meriendas para todos los presentes. Compartir después de la función era una gran alegría y para final . Escuchábamos embelezados "Una historia de Kasperl y el Polimanzist ":, corta y precisa.
La abuela de Kasperl deja una maceta con flores en el balcón y una mano misteriosa (con guante negro) roba la planta y Kasper sentado como de costumbre sobre el barandal del balcón, con sus piernas fuera del resguardo, arriesgado como siempre ve lo que sucede y da grandes llamadas, pide por el Polimanzist "pues solo el policía puede salvar la maceta de la abuela· y ahora hay una carrera entre el Polimanzist y la mano negra que tiene la maceta, para derecha e izquierda, de izquierda a derecha en la escena, y así varias veces, hasta que el “Poli” tiene la maceta entre sus manos y la mano negra desaparece como por arte de magia .Allí Oh! sorpresa! aparece  la abuela que se entera de lo sucedido y le da un beso hermoso a su nieto Kasperl, quién nada hizo sólo llamó a la ley... y mientras corrían comentaba la carrera en sus partes, todo muy graciosamente  “Tanto corría Polimanzist que se le desató el cordón del zapato y casi lo iba a perder”.......” Pero valiente Polimanzist como él era,, continuó la carrera y el zapato no se le cayó Ah! y, tampoco con el cordón se enredó....” ..... hasta la salvación de la maceta con la planta florida de la abuelida, ja, ja de la "abuelida"
La abuela en premio les da a todos un trozo de torta y "aquí no ha pasado nada, la planta con sus flores fué rescatada"..
La abuela temina dicendo:
Bellos días de Adviento y también día a día presintiendo la Nochebuena y ella les acerque a todos bendiciones.

Gracias a la imagen de Nancy, aquella que usó para hacer notar en el entorno los títeres vino a mi memoria este recuerdo de Kasperl y el Polimanzist. y sepan, queridos Amigos, tengo guardada en la manga otra historia la de Kasperl con el león, y ¡Aha! se relatará, Dios mediante, en otra ocasión.

La Loma, 11 de Diciembre de 2017
Tatiana Schneider



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